El ambientalista y presidente del CESTA hace un análisis sobre la situación en que se encuentra el planeta, y dice que la misma no es nada alentadora, pues las acciones de contaminación provocadas por la humanidad han causado daños irreversibles.
Wilber Corpeño
La Palabra Universitaria
En el marco de la celebración del Día Mundial de la Madre Tierra, el reconocido ambientalista y presidente del Centro Salvadoreño de Tecnología Apropiada (CESTA), Ricardo Navarro, hace varias reflexiones sobre el estado general en el que se encuentra el globo terráqueo.
Lamenta que con el paso de los años el planeta vaya mostrando un notorio deterioro causado por la actividad humana, a tal punto que se han producido una buena cantidad de daños irreversibles.
“Hemos excedido los límites del planeta. Hay un nivel donde en la Tierra se puede operar, pero en realidad los humanos nos hemos excedido en la capacidad de resiliencia que tiene nuestro planeta”, lamenta el ambientalista.
Dice que le mejor evidencia de ello es que en varias zonas oceánicas se ha comprobado la inexistencia del oxígeno, lo cual es verdaderamente gravé para el planeta.
Otros aspectos negativos que las actividades humanas han provocado pueden evidenciarse en que los suelos se están secando, lo cual genera un impacto directo en los ecosistemas, en las cosechas.
“Hemos tirado grandes cantidades de gases de efecto invernadero a la atmósfera que ha provocado que elevemos la temperatura más de un grado centígrado, lo que se traduce que hemos generado situaciones irreversibles en el cambio climático”, explica.
Otro de los efectos irreversibles que lamenta el ambientalista es la pérdida acelerada de especies vivas que cada año se está produciendo. Y es que, de acuerdo con algunos estudios, hace no muchos años, en un millón de especies se perdía una por año; en los tiempos actuales los reportes dan cuenta que se están extinguiendo entre 100 y mil veces más por año.
“Eso es verdaderamente grave, porque algunos científicos dicen que con el ritmo que llevamos para el fin de siglo podría ser de 10 mil veces más”, lamenta.
El ambientalista resalta que de manera particular El Salvador tiene una gran vulnerabilidad en aspectos ambientales, lo cual ha quedado evidenciado en los embates de las primeras tormentas del año; del mismo modo, dice, el país enfrenta serios problemas con el tema del agua.