La ponencia se realizó en el marco del VII Congreso Nacional y IV Internacional de Folklore y Tradición Oral en Arqueología.
Evelin Herrera
La Palabra Universitaria
Ritos mágicos y religiosos en los procesos migratorios en El Salvador fue uno de los temas de abordaje durante el VII Congreso Nacional y IV Internacional de Folklore y Tradición Oral en Arqueología, el cual fue organizado por la escuela de antropología de la Universidad Tecnológica de El Salvador (Utec), el Centro de Estudios Sociales y Universitarios Americanos S.C; y el Instituto de Antropología e Historia a través del INAH, Chihuahua, México.
La responsable de desarrollar dicho tópico fue la investigadora de la Utec, Elsa Ramos, quien manifiesta que el tema de las migraciones es importante no solo para las estadísticas, sino también para investigar las formas de cómo se ha transformado, debido a que en el pasado se migraba de manera individual y, sobre todo, eran hombres; sin embargo, con el tiempo se ha visto que ya migran mujeres, en ocasiones familias completas, en caravanas, etc.
“El fenómeno de las migraciones tiene un aspecto cultural que en El Salvador no ha sido incluido. En la parte conceptual, la ruta del migrante es un recorrido de más de 3 mil kilómetros desde El Salvador hacia los Estados Unidos”, por lo que dio a conocer que las personas hacen rituales para que el viaje pueda salirles de la mejor manera.
Ramos explica que un rito se trata de una costumbre o ceremonia que se repite de forma invariable de acuerdo a un conjunto de normas, por lo tanto, los ritos son simbólicos y expresan el contenido de algún mito.
La investigadora señala que en El Salvador hay mitos no solo de la herencia de la religión católica y otras religiones evangélicas, sino que también han sido influenciados por la globalización cultural. “Hay ritos aceptados por las religiones y ritos paganos que son condenados por prácticas de hechicería”.
Agrega que existen diferentes ritos, entre ellos los que son para purificación, donde se usa las “famosas siete hierbas” que se usan durante siete días después que una persona se baña, ya que se cree que limpia todas las malas vibras.
Por otro lado, están los ritos de tránsito. “En el mercado central se encuentran amuletos y velas rojas que se usan con la imagen de la Santa Muerte; asimismo, se acompaña a San Simón con cigarrillos, puros, loción o piedras de color blanco, celeste o morado. Limpia los pecados y ayuda a conseguir el objetivo final de llegar a los Estados Unidos”, dice.
Por último, están los ritos de acción de gracia, donde las personas hacen cadenas de oración y celebran misas para dar gracias por el ser querido que ha migrado y ha llegado con bien a su destino.
Ramos señala que es interesante conocer sobre la temática ya que es una forma que los especialistas en el área puedan explotar el tema e investigar a profundidad.