La disertación, que fue organizada desde la escuela de antropología de la Utec, estuvo a cargo la especialista en antropología, Lilian Ramírez.
Evelin Herrera
La Palabra Universitaria
La escuela de antropología de la Universidad Tecnológica de El Salvador (Utec) ha realizado una ponencia especializada en la que resaltó el desarrollo urbano y memoria histórica de la zona de San Antonio Abad, abordaje que estuvo a cargo de la antropóloga e investigadora, Ana Lilian Ramírez.
La ponencia se desarrolló con el objetivo de comprender la realidad a través de la historia, desde una perspectiva propia de la escuela de antropología, para generar y fortalecer la identidad cultural.
“En los últimos años, cada vez más hay una avalancha tecnológica que hace que se pierda la identidad cultural. Es importante tener una cultura global, pero es necesario conocer nuestra propia historia cultural”, dice el director de la escuela, Julio Martínez.
Ramírez menciona que esta localidad tiene su origen en 1903, cuando se dividió Cuscatancingo, Mejicanos y San Antonio Abad; ya que las personas que vivían en Cuscatancingo tenían al Santo Patrono San Antonio Abad y, cuando huyeron de ese lugar, le pusieron el nombre del santo al territorio donde se alojaron.
Ramírez expresa que parte de lo que le llamó la atención de San Antonio Abad es ese sentimiento de orgullo que los habitantes tienen. “Vi a un grupo de personas que venían con sus máscaras, bailando, cantando y cuando se fueron acercando me di cuenta de que eran niños y jóvenes; mi sorpresa fue que para la cofradía otros niños también tenían interés de participar en la danza y en las demás actividades”, describe.
La experta señala que es importante observar cómo la gente de ese pueblo se ubica dentro del territorio y tiene sus propias parcelas; además, invierten mucho en las festividades lo que hace que la gente se apropie de las celebraciones y de la identidad de San Antonio Abad.
Así mismo, dio a conocer que con el desarrollo urbano ha habido nuevos cambios que han trastornado la vida social de una comunidad; ya que, ha modificado el entorno y la cotidianidad de la población nativa, porque sienten esa división por el desarrollo urbano.
“Estas transformaciones identifican que el territorio es parte de los referentes culturales a partir del cual los nativos cumplen un sentido de pertenencia y de identidad. En San Antonio Abad conservan un sentido de pertenencia a ese espacio territorial, que ha sido invadido por la mancha urbana, ha sido fragmentado y se ha reacomodado”, expresa la experta.
Ramírez señala que el territorio es el espacio físico de los nativos debido a que recuerdan de lo que fueron sus antiguos territorios y lo que conservan en su memoria. Por medio de eso han establecido los límites entre el antes y el ahora, lo que les ha permitido conformar parte de su identidad actual.
“El territorio es la base de la identidad técnica y es como el escenario de la práctica cotidiana en la que se establece relaciones de carácter económico, político y cultural”, menciona Ramírez.
La especialista dice que la definición geográfica es donde relacionan el pasado, el presente y el futuro, además, expresa que a la historia territorial le imprimen significado y la riqueza la recuerdan a través de sus fiestas y procesiones.
“Son espacios para la memoria colectiva. En San Antonio Abad tienen bastante sentimiento de identidad a partir de la religiosidad popular y del territorio”, concluye.
