Nueva sala temporal del MUA expone la pintura abstracta de Pedro Ipiña

El arte de exponer emociones en la pintura abstracta es el nombre de la nueva sala que muestra el trabajo del maestro Ipiña, que ha llevado su arte a diversos países del mundo, como japón, Honduras, Estados Unidos, entre otros muchos.

Wilber Corpeño
Fotos: Alexander Morales
La Palabra Universitaria

El arte de pintar emociones en la pintura abstracta de Pedro Ipiña es el nombre de la nueva sala temporal, que recientemente ha inaugurado el Museo Universitario de Antropología (MUA) de la Universidad Tecnológica de El Salvador (Utec).

De acuerdo con las autoridades de la dirección de cultura, Pedro Antonio Ipiña, es un connotado artista plástico salvadoreño que desde hace más de 35 años ha creado pinturas de diversos estilos y técnicas, destacándose por obras con estilos figurativos y abstractos, mismos que ahora se pueden apreciar en esta nueva exposición que alberga el MUA.

“En esta ocasión el maestro Ipiña nos ofrece quince obras de arte que expresan emociones en su pintura abstracta”, ha dicho previo al corte de la cinta, el director de cultura de la institución, Ramón Rivas, quien se hizo acompañar en la mesa de honor por la vicerrectora de investigación y proyección social, Noris López Guevara.

Del mismo modo agrega que el maestro Ipiña cuenta con una prolífica carrera como pintor, lo que le ha permitido exponer su arte en varios países, entre ellos Japón, Israel, Honduras, Estados Unidos, Guatemala, entre otros.

Honduras fue precisamente el país donde encontró una tremenda acogida y una vasta fuente de inspiración para crear muchos de sus lienzos en óleo, acrílico o acuarela, con mensajes muy propios y destacando la belleza natural de esa región.

La exposición que se exhibe en el MUA consta de 15 obras que expresan la realidad social en la que se vive, por lo tanto, son obras que hablan por sí mismas, y expresan la cosmovisión de su autor.

“Este nuevo esfuerzo que hoy les presentamos, lo hacemos porque creemos que el arte es vital para una sociedad humana. Solo el hombre y la mujer pueden entenderlo, e inspirarse sobre lo que ven”, puntualiza Rivas.

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