El profesor de la escuela de psicología de la Utec enfatiza en la atención que las personas deben poner sobre este padecimiento, que con el pasar del tiempo podría desencadenar en severos daños para las personas.
Jackeline Elizabeth Mejía
La Palabra Universitaria
El trastorno del sueño y sus implicaciones ha sido un tema de análisis que recientemente dirigió el psicólogo de la Universidad Tecnológica de El Salvador (Utec), Benjamín López, en su acostumbrada participación en el espacio de entrevista televisivo 33 Te Escucha.
El psicólogo de la Utec afirmó que un sueño reparador logra cristalizar y consolidar los aprendizajes que en un futuro pueden ser de utilidad, es decir, aprendizajes que a largo plazo se podrían emplear; por tanto, si el individuo ha tenido un sueño reparador y realiza una actividad que demanda el intelecto, el resultado será efectivo, caso contrario, si la persona ha tenido noches de insomnio es muy probable que los errores sean evidentes dentro de la ejecución de tareas.
Dijo que el trastorno del sueño afecta a cualquier individuo que lo padezca; sin embargo, un sueño reparador y efectivo atrae resultados positivos en las actividades diarias. “Dormir bien nos permite reestablecer energía, nos revitalizarnos y nuestro estado de ánimo se ve con mucho espíritu”, señaló el psicólogo, mientras mencionaba otros aspectos negativos de la falta de sueño, debido a que este es de vital importancia como parte de las necesidades biológicas.
La cuarentena por causa del covid-19 provocó que muchos perdieran el sueño y, en consecuencia, el trastorno tomó un lugar en la vida de estos individuos, es decir, la pandemia vino a golpear los procesos psíquicos que intervienen en la calidad del sueño, por tal razón, el experto en la materia dijo que algunas personas recurren a la farmacología para conciliar el sueño, no obstante, la resolución del problema no radica específicamente en las pastillas.
Muchas personas manifiestan que tienen problemas para dormir o que despiertan en múltiples ocasiones durante la madrugada, por lo que el psicólogo dijo que hay otras manifestaciones, por ejemplo, las personas que despiertan durante tres o cuatro horas sin poder conciliar nuevamente el sueño, debido a esto es esencial mantener una disciplina determinada con las horas de descanso para no alterar el círculo circadiano, dado que este se encuentra relacionado con las horas de descanso.
“Si tenemos una mala calidad de sueño, se puede dormir diez horas, pero eso no significa que sea un sueño reparador, lo que incide es que puede haber pesadillas, terrores nocturnos, trastornos ansiosos o depresión; sin embargo, hay muchas variables relacionadas con la calidad del sueño y una pastilla no puede solventar todo, ya que hay que tratar de raíz el problema, por ejemplo, en una preocupación lo que hacemos de manera inmediata es tomar un medicamento, pero lo que está de fondo no se está solventando”, explicó el especialista.
En cuanto a la ayuda profesional con niños que padecen el trastorno, el psicólogo dijo que si se exceden a dos semanas de insomnio se trata de algo más crónico que se debe valorar y es necesario consultar con un especialista, debido a que muchas variables pueden intervenir, entre ellas a qué horas se va a la cama, si tiene y utiliza dispositivos tecnológicos que le quitan el sueño, si hay dificultades dentro del hogar, dado que usualmente un niño tiende a dormir aproximadamente siete horas.
Para finalizar, el psicólogo mencionó que dentro de las disomnias se encuentran todas las variables que se relacionan con la alteración en la cantidad, calidad o el horario al momento de dormir.