Muchos años han pasado desde que existió el primer equipo federado en Nejapa, población que ha visto nacer y morir varias iniciativas.
Douglas Canjura La Palabra Universitaria
Nejapa es un pequeño municipio ubicado al norte de San Salvador y su mayor reconocimiento se debe a su particular tradición de las bolas de fuego, que conmemora la erupción del volcán de San Salvador en 1658.
Pero por algún tiempo el fútbol también contribuyó al renombre de dicho lugar, deporte que tuvo una notable y gran evolución desde que se implementó por primera vez en el municipio, con la conformación de equipos representantes de esa población.
Los primeros equipos
Sin poder profesionalizarse, con muchas limitantes y precariedades, en 1935 el balón se puso a rodar y nació el club deportivo San Jerónimo, primer equipo de fútbol representativo de Nejapa y cuarenta años más tarde, en 1975, aparece el Slovan, un equipo que representaba a un grupo de personas mejor ubicadas económicamente.
El ex alcalde René Canjura, en su época cómo futbolista, participó como uno de los grandes contribuyentes en el desarrollo del fútbol de Nejapa, no solo como jugador, sino también por el apoyo que le dio a este deporte desde la alcaldía, cuando fungió como jefe edilicio.
El fútbol estuvo presente durante algunos años en río de cenizas (Nejapa, por su significado en Náhuatl), pero debido a la evolución del conflicto armado en el año de 1979, ambos equipos desaparecen y René Canjura, pieza clave en esta historia, abandona Nejapa para unirse a la guerrilla.
El brillo en los ojos de Canjura denota un poco de nostalgia al comentar que tuvo que dejar el fútbol para unirse al trabajo clandestino con las Fuerzas Populares de Liberación (FPL), suceso que define como un momento “duro” en su vida.
En 1994, después de haber finalizado el conflicto armado, Canjura regresa y es elegido por primera vez alcalde de la ciudad de las bolas de fuego y, desde ese cargo, comienza a apoyar el desarrollo del fútbol.
Nejapa se encontraba en un estado de abandono, pero el nuevo jefe edilicio comenzó a promover proyectos de desarrollo, se construyó un moderno y lujoso mercado, se pavimentó la mayoría de calles y se comenzó a promover el desarrollo del fútbol en la ciudad de las llamas.
Con el firme objetivo de convertir a Nejapa en “la ciudad deportiva de El Salvador”, Canjura, quien ya fungía como alcalde, inicia el proceso de masificación del fútbol en el municipio.
Se inicia en ese período la creación de un polideportivo que pudiera servir como fuente de entretenimiento, el cual inicia con una cancha de fútbol, luego se sumaron dos canchas de fútbol “papi” y la creación de varias piscinas, hasta convertirse en el lujoso polideportivo que actualmente es.
Con entusiasmo y optimismo se forma una escuela de fútbol bajo el nombre de Froilán Elespe, por la ayuda recibida de España, e inmediatamente la juventud y la niñez nejapense son atraídas por el poder de ese deporte y por un excelente proyecto que permitiría impulsar el desarrollo y, al mismo tiempo, adquirir valores.
La escuela de fútbol fue inicialmente dirigida por Lino Morales y los extranjeros Alex Guzmán y Hugo Bonilla, quienes comenzaron a formar jugadores para que algún día formaran parte del equipo profesional.
La profesionalización
Nejapa ya contaba con buena infraestructura y con una buena cantidad de niños y jóvenes en la escuela de fútbol pero aún faltaba que en el municipio existiera un equipo profesional.
El sueño de Canjura inicia cuando en el 2002 Nejapa da un paso inmenso hacia la profesionalización al comprarle la categoría de tercera división profesional a la Universidad de El Salvador (UES) y con ello nace el Nejapa Fútbol Club.
Con este acontecimiento Nejapa inicia un nuevo proceso, jamás dado en la historia, y comienza la aventura del fútbol profesional; la población nejapense abrasa este proyecto y lo toma con mucho optimismo, aunque los inicios del equipo fueron difíciles.
En este mismo año se inaugura el polideportivo con el nombre de Vitoria Gasteiz, nombre heredado por la ayuda de dicha ciudad española.
Dos años tuvieron que pasar para que el equipo “tira fuego” lograra ascender a segunda división. Luego de realizar un excelente torneo el Nejapa da un paso gigantesco cuando derrota a su vecino Juventud Independiente, de San Juan Opico.
El sueño de Canjura veía un poco de luz en la oscuridad, no solo por la inauguración del iluminado de la cancha principal, sino porque poco a poco Nejapa se convertía en “la ciudad del deporte”. Nejapa ya contaba con un equipo en la liga de ascenso y un buen grupo de jóvenes nejapenses que formaban parte de este histórico club.
En el año 2006 sucede el acontecimiento más grande en la historia del fútbol nejapense, el gran objetivo se logra, el Nejapa F. C. logra ascender a la liga mayor profesional. Nejapa realiza esta hazaña al derrotar al Juventud Independiente con un marcador de 3 a 2.
Esa tarde fue mágica comenta Don Guadalupe Parada, un nejapense y gran aficionado de su equipo. “Toda la población de Nejapa hiso presencia en el estadio Cuscatlán para apoyar nuestro equipo”, expresa el aficionado con mucho orgullo.
Entre silbidos, aplausos, gritos, llanto y un estadio Cuscatlán abarrotado, el Nejapa F. C. logra ascender a primera. “Algo difícil de creer y que jamás lo imaginábamos”, dice don Guadalupe
El hecho de tener un equipo en la liga mayor le da mayor realce al pueblo de las bolas de fuego. El nombre Nejapa adquiere mayor reconocimiento y la población es fuertemente entusiasmada por el título.
Luego de doce años como edil, René Canjura, quien era el máximo apoyo en dicho proyecto, pierde las elecciones y el equipo sufre la falta de apoyo, sobre todo económico y esto desencadenó una crisis en el equipo.
La pérdida de la alcaldía por parte de Canjura significó la pérdida del apadrinamiento por la comuna, la negación a brindar las instalaciones deportivas para el equipo y una serie de complicaciones derivadas de la falta de apoyo por la dirigencia edilicia entrante.
“Todo el proyecto se vino abajo ya que la nueva alcaldesa, Wanda Calderón, no quiso ni siquiera prestar la cancha para jugar, expresa Guadalupe Parada.
Canjura tuvo que dejar dicho proyecto y el equipo se vio sin ningún apoyo y por ello tuvo que emigrar hasta Chalatenango, al estadio Gregorio Martínez y cambió su nombre de Nejapa F. C., a llamarse Alacranes del Norte; el mismo equipo pero con otro nombre.
En una ciudad extraña y con una afición que poco apoyaba el proyecto y sin la ayuda de Canjura, quien fue el precursor, un grupo de ex jugadores del equipo tira fuego y toman las riendas del proyecto.
Pero sin una buena administración y sin un gran apoyo, el proyecto que nació en Nejapa y que dio muchas alegrías a los nejapenses muere en el año 2010, en Chalatenango, dejando un mal sabor y tristeza entre los aficionados del histórico Nejapa F.C.
“Fue difícil porque yo vi crecer el equipo, jugué en las tres categorías y lo vi desaparecer”, comenta Jimmy Najarro, un nejapense que fue parte de todo el proceso que pasó el equipo tira fuego.
Najarro comenta que fue una “experiencia muy linda” ya que el fútbol le permitió crecer como persona y alejarse de cosas negativas.
“El pájaro”, sobrenombre con el que se le conoce a Jimmy, fue uno de los jugadores que vivía con más pasión cada partido disputado por el hecho de ser nejapense y vivió los dos ascensos que el equipo tuvo, pero vivió lo más duro de su carrera deportiva, la desaparición del equipo.
La pasión de Jimmy por el fútbol y por el equipo que le llevó al profesionalismo se manifiesta por la presencia de lágrimas en sus ojos, al conversar sobre el extinto equipo tira fuego.
Situación actual
El ambiente se tornó silencioso y desolado después de haber terminado todo ese proceso y la población comenzó a extrañar la actividad deportiva que cada fin de semana se vivía en el pueblo.
Luego de algún tiempo las autoridades edilicias de ese entonces deciden iniciar desde cero, como cuando existía el San Jerónimo y el Slovan, y compran una categoría en liga media y nuevamente regresa el fútbol al municipio, aunque no con la misma aceptación del pueblo.
Es retomado el nombre del primer equipo federado en la historia de Nejapa, San Jerónimo, y luego de disputar alrededor de ocho torneos, logra ascender a tercera división, categoría que actualmente disputa y que intenta sobrevivir al descenso.
Jimmy Najarro regresa a su municipio a jugar con el nuevo San Jerónimo y su buen desempeño conduce al equipo a ese nuevo ascenso, lo cual significó el retiro de las canchas para “el pájaro”.
La melancolía y el sentimentalismo salen a flote por el recuerdo de todas esas anécdotas vividas, los ojos de Jimmy Najarro se comienzan a poner brillosos y poco a poco se llenan de lágrimas.
En la actualidad existen cuatro equipos que disputan diferentes ligas federadas, el San Jerónimo, de tercera división; la filial de San Jerónimo, de liga media; Mides Adesco Mapilapa, que también juega en liga media.
Para este año nació el Fuerte Mapilapa, siempre en liga media o aficionada. Estos últimos dos son representativos de la Hacienda Mapilapa, en la zona rural de Nejapa.