El psicólogo y docente de la Utec fue invitado como panelista al programa de entrevistas televisivas para hablar sobre el desánimo escolar en los niños.
Victoria Guerra
La Palabra Universitaria
Robert Macquaid, docente y neuropsicólogo de la Universidad Tecnológica de El Salvador (UTEC) fue invitado como panelista en el programa de entrevistas 33 Te Escucha, en el que hizo un análisis completo sobre las causas que podrían incidir en el desánimo escolar en los infantes.
De acuerdo al profesional, el desánimo escolar afecta a muchas personas y lo sufren por igual los padres y los hijos, ya sean niños o adolescentes; sin embargo, lamentó que hay muchos casos en que los afectados no se atreven a revelarlo y sufren silenciosamente.
“La falta de motivación en los niños y jóvenes es la falta de motivación de sus familiares”, dice el profesional, al tiempo que hace un llamado, especialmente a los padres de familia, a que pongan mayor atención a sus hijos y que estén siempre atentos al comportamiento de ellos.
Expone que los niños muchas veces tienden a desanimarse y desatenderse de sus estudios cuando se dan cuenta que sus padres no se interesan por sus actividades escolares; por lo tanto, en muchas ocasiones los lleva a la frustración de no poder hacer por si solos las actividades que encomiendan sus profesores en la escuela.
Otra de las causantes, describe, podría ser la poca atención que ponen los profesores sobre el nivel de comprensión que van teniendo sus estudiantes en el salón de clase, pues muchas veces los educadores se limitan a impartir diversas temáticas sin tomarse el tiempo de verificar el nivel y capacidad de comprensión de los niños.
Apunta que detrás del desánimo estudiantil podría existir un sinfín de realidades, por lo tanto, se vuelve necesario que los mayores “tomemos conciencia sobre la importancia del proceso formativo que sobrellevan los niños”.
El experto puntualizó que, en el contexto actual, derivado de la pandemia, el tema de la virtualidad se ha convertido en una de las causas más potenciales del desánimo escolar; por lo tanto, hay mucho trabajo por delante, especialmente de los padres que están obligados a enrolarse en el tema del uso de las tecnologías, pues es la única manera en que harán más llevadero el proceso de adaptación de sus hijos.