La edificación, que está ubicada en el barrio San Jacinto, recibió la declaratoria de bien cultural el 07 de enero de 2003.
Wilber Corpeño
La Palabra Universitaria
La Dirección de Registro de Bienes Culturales conmemora veinte años de la declaratoria como Bien Cultural de la antigua Casa Presidencial, por medio de un acuerdo ejecutivo emitido el 07 de enero de 2003.
Según han explicado, el edificio de la antigua Casa Presidencial ha sufrido una serie de intervenciones en diferentes épocas, razón por la cual el estilo que presenta se puede definir como ecléctico, por la marcada influencia de estilos arquitectónicos tanto del renacimiento italiano como del modernismo.
El edificio fue diseñado para ser la Escuela Normal de Varones o de Maestros; pero en 1911, por mandato del presidente, Manuel Enrique Araujo, la propiedad fue adquirida por doce mil colones.
En 1913, el presidente Carlos Meléndez colocó la primera piedra del nuevo edificio, el cual fue construido por Fleury, de origen francés, y el arquitecto italiano Gino Zaccagna.
La estructura fue dañada por los terremotos de 1917 y 1919; fue remodelada y restaurada por el arquitecto Amalio Lara y puesto en funcionamiento en agosto de 1924.
Tras el golpe de Estado de 1931, los educadores en formación fueron desalojados del edificio y el mismo fue sometido a obras de reparación y modernización coordinadas por el arquitecto Augusto Baratta del Vechio; luego fue destinada como sede de la Casa Presidencial de El Salvador.
23 administradores presidenciales usaron esta sede, desde Maximiliano Hernández Martínez hasta Francisco Flores, en cuyo período se decidió el traslado de las oficinas de Casa Presidencial a la actual ubicación (2001).
El edificio cuenta con salones abiertos al público en el primer y segundo nivel: salón de recepciones, Salón Presidencial, Salón Juan Manuel Rodríguez, Salón José Simeón Cañas (Salón Azul), Salón de Honor, Salón Doctor José Matías Delgado y Salón Gerardo Barrios. En el inmueble funciona también la Sala de Exposiciones San Jacinto.